Las partes de una cerradura

Para el usuario la cerradura es sencillamente donde introduce la llave para abrir o cerrar la puerta.

Sin embargo, las partes que componen una cerradura o los tipos de cerraduras, son un poco más complejos y pueden resultar a veces confusos para el usuario.
Así que nos parece buena idea explicar la terminología y los elementos  que componen una cerradura, con el objetivo de ayudar a todo el mundo a saber un poquito más sobre el tema.

Empecemos por distinguir que tipo de cerradura tienes.
Nos centraremos en los 2 más habituales:

Cerraduras embutidas:

Va incrustada dentro de la puerta.

• Bombillo: También llamado cilindro o bombín, es la pieza sobre la que recae gran parte de la seguridad de la puerta. Es el mecanismo que nos permite descodificar la cerradura al introducir la llave. Al ser una parte reemplazable, es muy recomendable cambiar el habitual bombillo de perfil europeo por un bombillo de seguridad anti-bumping, anti-ganzúa, es decir, que nos proteja de los nuevos métodos de los ladrones para forzar puertas. También cabe apuntar que hay cerraduras que no tienen bombillo, como por ejemplo las cerraduras de borjas o de pompa, por lo que llevan una pieza llamada bocallave, que es el orificio para introducir la llave.

• Tirador: También conocido como manilla, manija o pomo. Es el agarrador que sirve para desplazar la puerta al abrir o cerrar.

Puede tener un mecanismo de bloqueo del resbalón accionado por llave, que funcione como una cerradura sin serlo propiamente dicho. Un buen ejemplo sería la cerradura de un portal.

• Escudo o embellecedor: Es la parte que se ve en ambos lados de la puerta sobre el que va el pomo. Puede estar integrado con el pomo.

• Frontal: Es la parte que une la cerradura al bombillo y esta a la puerta.
• Resbalón: Es la pieza que se retrae dentro de la puerta cuando abrimos y se encaja en el marco cuando cerramos la puerta.
• Paletón o bulones: Funciona igual que el anterior, sólo que nos permite echar la llave.
• Cerradero: Es la parte metálica en el cerco o marco de la puerta, en la que encaja el paletón y el resbalón.

Cerraduras de sobreponer:

Va instalada sobre la puerta.
Como medida adicional de seguridad, puede llevar anclajes al suelo y al techo.
En una cerradura de sobreponer, podemos ver tanto la cerradura como el cerradero.

Es más sencillo: Tenemos un macho (pestillo) y una hembra (parte del marco de la puerta, en la que encaja el pestillo).
En la parte principal o palastro, va encajado el bombillo y los pomos del exterior e interior.

Si quieres realizar una consulta, cambiar tu bombillo o cerradura contacta con nosotros sin compromiso: 91 429 18 82 o en nuestro formulario de contacto.