En un mundo donde la transformación digital afecta a todos los ámbitos y la tecnología forma parte de nuestra vida diaria, se tiende a olvidar y desprestigiar la eficacia de procesos y sistemas clásicos, como por ejemplo en los sistemas de seguridad.
Con la implantación de hogares inteligentes, la seguridad del hogar tiende a digitalizarse y sustituye los sistemas de protección convencionales por otros más actuales que ofrecen las mismas prestaciones, junto con un plus de comodidad y calidad.
El Internet de las cosas ha permitido insertar en los hogares sistemas de seguridad más funcionales y eficaces, lo que ha supuesto un salto en la industria respecto a los sistemas de seguridad convencionales.
Este avance tecnológico permite simplificar la instalación de elementos de seguridad y conectar con la vivienda desde cualquier punto únicamente con un dispositivo y conexión a Internet.
Además, estos nuevos sistemas permiten implantar un control de acceso a hogares y negocios de forma precisa, garantizando exponencialmente la seguridad del lugar.
La domótica es un recurso que cada vez es más imprescindible en muchos de nuestros hogares.
Según los expertos, la revolución aún no ha tocado techo y la automatización del hogar seguirá experimentando cambios sustanciales.
Entre sus funciones más comunes, esta tecnología permite: controlar las luces del domicilio, gestionar el termostato, controlar el sistema eléctrico del hogar, así como los sistemas de ocio y entretenimiento, y es capaz de activar controles de humedad.
Con ayuda de un dispositivo, como puede ser un smartphone, es posible accionar y apagar las luces del domicilio, subir y bajar las persianas y realizar otras funciones relacionadas con la seguridad del hogar.
En periodos de vacaciones, es una buena forma de dar pistas a los asaltantes de que el hogar está ocupado y desistir en su propósito de asaltar el domicilio, contribuyendo de forma activa con la seguridad del inmueble.
Las cámaras de videovigilancia han permitido a propietarios, tanto de inmuebles como de negocios, conocer lo que ocurre mientras ellos no se encuentran en el lugar.
Actualmente, no es necesario recurrir a un circuito cerrado de alarmas de vigilancia para conocer si se ha accedido al interior del inmueble o negocio.
La tecnología ha hecho posible que únicamente con el uso de un smartphone sea posible conocer lo que ocurre en el establecimiento en tiempo real y desde cualquier lugar, únicamente disponiendo de acceso a la red.
Esta función permite garantizar la seguridad y protección de la vivienda o negocio, ya que los propietarios pueden adelantarse a los asaltantes y comunicar a las autoridades pertinentes el intento de acceso no autorizado.
La tecnología ha permitido colocar en el domicilio un ingenioso escudo frente a los ladrones, una cerradura invisible, la cual aporta un alto nivel de seguridad al domicilio.
Este tipo de cerraduras se instalan en la parte interior de la puerta, quedando totalmente oculta desde el exterior de la vivienda.
Se acciona con ayuda de un mando a distancia, similar a la llave de un vehículo, el cual es capaz de abrir y cerrar la puerta a través de códigos encriptados anticopia de código evolutivo.
Las cerraduras invisibles incorporan una pequeña alarma capaz de avisar a los propietarios de los movimientos de la puerta, comunicando incluso cuando la puerta no está cerrada correctamente.
Controlar el acceso de personas a determinados recintos, asegura evitar intrusiones no autorizadas y de esta forma, evitar robos en domicilios y/o el lugar de trabajo.
Las nuevas tecnologías han creado la biometría, el sistema más seguro y eficaz para soluciones de identificación de personas y control de acceso.
Este sistema sólo acciona la puerta mediante la identificación de la huella dactilar, reconocimiento facial o pin de seguridad, dependiendo del grado de seguridad que requiera cada estancia o recinto.
La tecnología se ha integrado en nuestra vida diaria, ofreciéndonos protección y confort en domicilios y negocios.
A pesar de ello, sistemas de seguridad convencionales como las puertas acorazadas o las cajas fuertes, aportan una garantía de calidad que no proporcionan los nuevos sistemas.
Las nuevas tecnologías aún no han diseñado un elemento de seguridad tan eficiente como son las puertas acorazadas.
Este tipo de puertas de altísima seguridad están construidas con sólidos materiales como es el acero e incorporan diferentes elementos que consiguen impedir el acceso a cualquier persona que no disponga de la llave.
Fichet Madrid, empresa líder en el sector de la seguridad, recomienda no comprometer la seguridad del inmueble. Por ello, recomienda la instalación de puertas acorazadas Stylea para viviendas unifamiliares o situadas a la intemperie y las puertas acorazadas Foxeo para piso.
A pesar de las ventajas que proporcionan las cerraduras invisibles, estas todavía no ofrecen las mismas prestaciones como las cerraduras de seguridad.
Las cerraduras invisibles no pueden ser instaladas en puertas que se encuentren a la intemperie, es decir, en reja o puertas valladas, limitando su uso a recintos cerrados.
Por otro lado, estas cerraduras no son compatibles con puertas acorazadas.
Fichet Madrid recomienda, en cambio, el uso de cerraduras de alta seguridad como son las cerraduras Vertipoint y Fortissime.
Estas cerraduras están provistas de tres o cinco puntos de cierre, dos o cuatro de ellos de tipo basculante de gancho. Este diseño permite absorber el empuje que ejercen los ladrones sobre la puerta, impidiendo su entrada al domicilio.
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