Gracias a la tecnología y la resistencia física se consigue dificultar la entrada de ladrones y estar informado sobre qué pasa en tu hogar las 24 horas y así, aumentar su seguridad.
Según el Balance de Criminalidad del Ministerio de Interior, en el primer trimestre de 2018 se sufrieron 28.719 robos con fuerza en el domicilio, frente a los 27.384 del último trimestre en 2017. Teniendo en cuenta que los robos aumentan en épocas de vacaciones de verano debido a que los propietarios no están, los ladrones aprovechan para desvalijar sus casas.
Actualmente, los ladrones se conocen todas las técnicas para entrar en cualquier hogar, por lo tanto, es muy importante tener tu casa bajo control adquiriendo una buena puerta, cerradura y alarma.
Con ellas, aumentarás la seguridad de tu hogar y dificultarás la entrada de ladrones. Para ello, Fichet ofrece una alarma autónoma integrada en la puerta acorazada de la marca. Se trata de Citadelle, un sistema integrado en la puerta acorazada que activa una alarma sonora en caso de ataque o robo.
En los últimos años se ha aumentado la okupación en segundas residencias, llamado «okupación ficiticia». Este término hace referencia a delincuentes que fuerzan la entrada, cambian el bombín y okupan la casa para sobornar a los propietarios.
Fichet dispone de unas cerraduras especiales que se pueden colocar en cualquier puerta, sobrepuestas por el interior, que disponen de un sistema de protección activa llamada “Paratakc”. Es un mecanismo, que en caso de ataque exterior al bombillo, autobloquea todos los pestillos del gancho de la cerradura, haciendo imposible retraer los mismos y la entrada en la vivienda. Y a parte, haciendo imposible el cambio de bombillo y la vuelta a la normalidad de la cerradura denominada Fortissime, que no volverá a funcionar con ningún cilindro.
En el sector de la cerrajería, lo primordial es la seguridad a parte de la comodidad y eficiencia que han posibilitado la creación de nuevos productos como el control al acceso sobre apartamentos turísticos o pisos de alquiler temporal.
Este control de acceso se basa en un producto sin wifi ni complicadas instalaciones que permite al inquilino entrar en el piso sin la presencia del propietario, es decir, una vez que se alquila el piso, el inquilino recibe un código encriptado para acceder al inmueble durante el periodo de alquiler. Pasado ese periodo, la clave caduca y no es válida para volver a acceder a la vivienda. Es un proceso sencillo ya que no requiere cambios de puerta ni paño, simplemente es necesario instalar un bombín especial con un motor que lo reconozca y sea recargable.
Por lo tanto, la tecnología va evolucionando constantemente para facilitarnos la vida, de una manera más cómoda y segura.
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